Venezuela: país exportador de talentos

Colección Semanal #09

Venezuela: país exportador de talentos

"Los débiles no luchan. Los más fuertes quizás luchen una hora. 
Los que aún son más fuertes, luchan unos años. 
Pero los más fuertes de todos,
luchan toda su vida, 
éstos son los indispensables."

Bertolt Brecht

Ya en una entrega anterior titulada ¿migar o luchar? tocábamos el tema de lo que significaba vivir en un país donde las oportunidades de crecimiento y desarrollo personal y profesional se hacían cada vez más escasas y difíciles. Venezuela durante los últimos años se ha convertido en el país de las incertidumbres. No por exagerar se utiliza este término sino entre otras cosas, por el dilema en que se hallan muchos venezolanos independientemente de su inclinación política.
La Venezuela del siglo XXI se encuentra en una encrucijada entre los que apuestan a mantener el pasado vivo y fundar bajo sus cenizas, un país con los ideales independentistas vivo. Otra parte del país apuesta por transitar un camino de paz, progreso  y superación que tanto le ha costado a la nación obtener. Hoy en día, en la Venezuela del siglo XXI, seguimos enfrentando los dilemas que ya otros países han superado. Venezuela se encuentra sin alimentos, sin medicinas, sin repuestos, con una educación en picada, así como un sistema de salud donde muchos pacientes que acuden –no porque quieran sino porque lo ameritan- a un hospital público, muchos son atendidos en los pasillos del mismo porque no hay camas ni habitaciones suficientes para ser atendidos. Un país donde los ingresos petroleros en estos últimos 15 años han sido incalculables, y a su vez, se han convertido en los más grandes ingresos obtenidos en doscientos años de república independiente, todavía se halla en la más deplorable y dolorosa crisis económica, política y social.

Hoy en día, los jóvenes también se hayan en una encrucijada, en un permanente debate que es dirigido por la pregunta que se ha vuelto común, ¿te vas o te quedas? Ya decíamos en ¿migar o luchar? que los jóvenes deben ser vistos como un instrumento de crecimiento y desarrollo. A pesar de esto, la realidad que aqueja al país es totalmente distinta. Si para otros países del continente Americano, Europeo o incluso Asia, son los jóvenes esa principal fuente de donde surge el ingenio y la creatividad, en Venezuela se exporta talentos de todas las edades. Nuestras universidades se han vuelto en las embajadas para que los jóvenes se formen y al final de la carrera, retiren sus papeles y exijan su certificado de notas para el exterior.

Si hubiera tan solo un poco de sensatez en el gobierno que preside el poder actualmente en Venezuela encabezado por el ciudadano y presidente de la República Nicolás Maduro Moros, en medio de la crisis que enfrenta el país actualmente,  una de las primeras medidas que hubieran de tomarse seria solicitar a los expertos, a los mejores economistas, a los mejores ingenieros, a los más altos profesores y profesionales del país –que muchos, dicho sea de paso aún siguen en el país y apuesta por el- a afrontar, trabajar, dirigir y planificar las medidas que sean necesarias para salir de la crisis en la que nos encontramos. Para esto solo hace falta algo, voluntad política.
Mientras otras naciones discuten sobre otros problemas de índole más importante para el mundo como lo son el efecto invernadero, la contaminación, el calentamiento global, la búsqueda para detectar enfermedades mortales, Venezuela sigue enfrentándose a como poder producir, arroz, maíz y los alimentos necesarios para poco más de treinta millones de habitantes.
Una de las claves en estos momentos de mundialización y globalización pasa justamente por la integración y la multidisciplinariedad que debe existir a la hora ofrecer explicaciones serias. Con esto, la juventud se perfila no sólo a ser agentes de cambio, no sólo a ser una fuerza de trabajo ni solamente entenderse como una población en edad activa para trabajar. Sin embargo, en Venezuela parece faltar mucho tiempo para que estas voces -la de los jóvenes- pueda ser oída, escuchada e insertada a los espacios más normales, diversos y extraordinarios de nuestra sociedad. No obstante, la juventud que emerge enfrenta una posibilidad casi inigualable de afrontar los dilemas que nos ha perseguido por mas de doscientos años. hoy en día gran parte de la población esta consiente de que no es precisamente por las armas que lograremos surgir como nación. Más bien representa el trabajo de cada uno, el ingenio y la creatividad de cada individuo lo que nos conducirá a progresar como país. Detrás de cada dificultad se esconde una serie de oportunidades que sólo los valientes han de percibir y aprovechar. Venezuela enfrenta una gran dificultad pero cuenta con un capital social importante para evolucionar como sociedad.
Link de imágenes:
Share on Google Plus

About Francisco J. Julio R.

This is a short description in the author block about the author. You edit it by entering text in the "Biographical Info" field in the user admin panel.
    Blogger Comment
    Facebook Comment

0 comentarios:

Publicar un comentario